CUANDO ESTÁS ABATIDO (A)
TEXTO: SALMO 6. 1-10
A veces no se necesita mucho para que nos sintamos abatidos, ¿verdad? . Un comentario poco amable de un amigo, malas noticias del mecánico del automóvil, un revés económico o un hijo que se porta mal, pueden poner una nube de tristeza sobre todo, incluso en el día más soleado. Sabes que deberías estar gozoso, pero todo parece sestar en tu contra, lo cual haces que las tareas más sencillas se conviertan en una lucha.
David debió haberse estado sintiendo de esa forma cuando escribió el Salmo 6. Se sintió débil y enfermo: (v.2), “Ten misericordia de mí oh Jehová, porque estoy enfermo”; angustiado, (v.3), “Mi alma también está muy turbada; y tú Jehová, ¿hasta cuándo?; (v.5) “Vuélvete, oh Jehová libra mi alma. Sálvame por tu misericordia” abandonado; (v.6), cansado, “Me he consumido a fuerza de gemir; todas las noches inundo de llanto mi lecho, riego mi cama con mis lágrimas”;y muy apenado,(v.7), “Mis ojos están cansados de sufrir”.
Pero él sabía que hacer cuando estaba abatido. Miraba hacia el cielo, oraba a Dios y confiaba en que él le ayudaría a pasar todo aquello.
Cuando miramos hacia Dios y nos centramos en él, quitamos la mirada de nosotros y apreciamos a Dios de una nueva manera.
La próxima vez que estés abatido trata de mirar hacia arriba, hacia Dios. El es soberano, Salmo 47.8 “Reinó Jehová sobre las naciones; se sentó Dios sobre su santo trono”;te ama, 1Juan 4.10, “En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados”; te considera especial, Mateo 6.26 “Mirad las aves del cielo que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis nosotros mucho más que ellas?: sus pruebas tienen un propósito, Santiago 1.2-4, “Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia. Mas tenga la paciencia su obra completa, para seáis cabales y perfectos, sin que os falte cosa alguna”.
La vida parece insoportable a veces, pero no dejes que te abata. Medita en la bondad de Dios, conversa con él, él te escucha, Salmo 6.9, “Jehová ha oído mi ruego; ha recibido Jehová mi oración”. Esto te dará fuerzas para levantarte cuando estés abatido (a).
"CUANDO LA VIDA TE PONGA DE RODILLAS, ESTÁS EN LA POSICIÓN CORRECTA PARA ORAR."
por: Franklin Villegas